La diferencia entre la 1 y la 2
- Naty Segura
- 1 jun 2019
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 2 jun 2019

El 1 y el 2 no son números iguales, sin embargo en distintos escenarios podrían interpretarse como similares.
Yo soy el 2, y por un momento creí que debía estar bajo la sombra del 1.
Eso me puso triste, pero analizando las cosas llegue a estas conclusiones:
Quizá el 2 está destinado a tener el doble de capacidad de brindar amor, ya que aceptar estar en esta posición es cuestión de decisión y no de imposición. Y si de algo estoy segura es que no todos tienen la capacidad de ser 2.
Sí, el 1 llegó primero, hizo todo primero e inclusive como en mi caso vivió muchas primeras veces que nunca experimentaré. Observó como su vientre crecía, sintió pataditas, dio a ese bebé TODO lo que es, sí todo, hasta lo que no hubiera querido dar.
Yo como 2 puedo conocer esas primeras veces desde historias maravillosas que su papito me cuenta, también podré vivir otras primeras veces, la vida aún empieza.
No se como ama un 1, pero se como ama un 2 y se requiere mucha fortaleza que solo un corazón distinto como el del 2 posee.
No sentí como mi cuerpo cambiaba, ni experimente el milagro de crear un ser dentro de mí. Pero si pude observar como mi corazón crecía y se llenaba de más amor, pude experimentar el amar a alguien que no lleva mi carga genética. Observé como mi mente, alma y corazón cambiaba para recibir a un ser que es parte de lo que más amo en la vida. No puedo verme reflejada en ella pero si puedo verlo a él.
Tengo la ventaja de escoger que ejemplo puedo darle, que cosas puedo brindarle y enseñarle, aunque a veces es difícil que no vea cosas en mi que no quisiera que repitiera.
Se que habrán cosas que yo como el 2 no podré vivir junto a ella pues es lugar del 1. Aunque sea triste lo entenderé porque conozco bien mi lugar. Al fin y al cabo que ella sea feliz es lo más importante, ya viviremos juntas otros momentos como lo hemos hecho y en verdad han sido maravillosos.
Aprendí que ser el 2 no es tan malo como se pinta, disfruto ser el 2. Puedo ser una mezcla entre mamá, cómplice, amiga, consejera.
También aprendí que el 2 no debe estar detrás del 1, si no al lado. Ella podrá vernos a ambos 1 y 2 y acudir a quien necesite en ese momento específico. Yo el 2 siempre estaré ahí esperando por ella cuando me necesite porque todos los días tomo la decisión de ser y estar para ella como el 2 que orgullosamente soy.
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